Violan la autonomía: complot para cancelar el pago de las jubilaciones dinámicas en la UAS

Nada es casual: la autonomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa es amenazada desde el exterior, con el apoyo de un grupo no mayor de 38 universitarios, ávidos de reflectores, de ambiciones desbordadas, fáciles de pilotear. La conspiración contra la Universidad es auspiciada por una pequeña célula de jubilados y “agentes de afuera” que, cueste lo que les cueste, buscan secuestrar al alma mater.

A quienes conspiran, que no son mayoría y ni a minoría llegan, les estorba la unidad y la estabilidad de la máxima casa de estudios. Proyectan el retorno a las aulas y al campus el insulto y la agresión física. Usan el sonsonete de la “democracia” para embestir. Quienes atentan contra la Universidad son los mismos de siempre: los «rojos», cuyo líder, Marco Antonio Medrano Palazuelos, un ex universitario, se ha puesto al servicio del PRI y del PAN y ahora de una facción de Morena en su alocada carrera por “reventar” la autonomía de la casa de estudios.

Los Medrano, no hay duda, obedecen consignas. Son pocos, casi nada, una minoría de la minoría, pero los “agentes externos” le arriman estratégicamente apoyo periodístico para que siga intentando vulnerar a la casa de estudios. El “padrino” de Medrano días atrás le prestó dos diputados locales de Morena para que “refuerce” la desestabilización de la institución.

Los dos diputados Pedro Villegas Lobo y Beatriz Adriana Zarate ya violaron la autonomía del sindicato de trabajadores administrativos y braman que “rescatarán” la UAS, cuando en realidad son usados como piezas de un engranaje/complot que procesa el hundimiento de la máxima casa de estudios.

El objetivo es “reventar” a la UAS, minar su fortaleza y cancelar su autonomía. Una vez consumada la canallada, proceder, sin oposición de por medio, a eliminar la jubilación dinámica. Ya han dado pasos en este sentido.

El atentado a los trabajadores

Nada es casual: con el triunfo de Andrés Manuel López Obrador, el Frente Nacional de Apoyo a la Educación Superior ha venido insistiendo en la cancelación de la jubilación dinámica o doble jubilación en las Universidades Públicas.

Al pedir al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, el cese de ésta práctica, la organización civil de corte morenista aseguró que derivado del pago de las jubilaciones dinámicas, universidades del país de diversos estados se encuentran en crisis.

“Algunas Universidades Públicas pagan salarios completos, bonos, vacaciones, etc, a sus jubilados como si se tratara de empleados en activo. Estos reciben también sus pensiones o jubilaciones del IMSS o del ISSSTE. Gozan de dos pensiones… Forma parte de la casta de privilegiados”, detallaron en un documento hecho llegar al presidente Obrador y publicado en la prensa nacional.

Nada es casual: la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y de la Secretaría de Educación Pública advirtieron que “no apoyarán con recursos” para el pago de la jubilación dinámica o la doble jubilación a las Universidades Públicas que no cuenten un esquema de aportaciones económicas de los trabajadores.

En concreto: ni la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ni la Secretaría de Educación Pública reconocen los contratos colectivos que “amparan” el cobro de las jubilaciones dinámicas o dobles jubilaciones, práctica de que adoptaron algunas universidades del país 25 años atrás para tomar una parte de los recursos de la educación superior para destinarlos al pago de una extra-prestación a sus trabajadores jubilados.

Por más de 20 años, se habían usado recursos del Fondo de Apoyo para la Atención a los Problemas Estructurales de las Universidades Públicas Estatales para el pago de las jubilaciones dinámicas, pero “este respaldo financiero se cancelará a las Universidades en las que los trabajadores jubilados o en activo no quieran aportar para completar el monto de una prestación que al final los beneficia a ellos”.

Para el gobierno federal destinar recursos para cubrir jubilaciones dinámicas del Fondo para la Atención a Problemas Estructurales de las Universidades, ramo que no entró en el Presupuesto de Egresos 2019, representa un “boquete” financiero, por lo que se volvió a exigir a las Universidades crear fondos o fideicomisos con aportaciones de los trabajadores, en activo y jubilados, para sostener la carga de la doble jubilación.

Se trata de la última llamada ya que este año el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador decidió “cerrar la pinza” y retirar los apoyos “adicionales” para el pago de jubilaciones dinámicas para aquellas Universidades que no cuentan con fondos o fideicomiso, en el que los trabajadores no participen aportando un porcentaje de su salario o de su jubilación dinámica.

Medrano allanó el camino

Nada es casual: meses atrás, Marco Antonio Medrano Palazuelos, apoyado por “agentes externos” y algunos medios de comunicación que desorientaron a los trabajadores universitarios, “reventaron” el Fideicomiso de la Jubilación Dinámica de la UAS que le daba viabilidad y permitiría sin sobresaltos el pago de esa prestación por 25 años más.

Para consumar la infamia se desató una campaña de linchamiento contra las autoridades de la UAS y se volvió a atacar la autonomía de la institución y a lanzar acusaciones sin límites. Tergiversando, no informando, se difundía que el dinero del Fideicomiso se estaba robando.

Después de una batalla legal de un minúsculo grupo de jubilados, ligados a Medrano, un juez determinó que no procedía el descuento a los trabajadores si ellos no estampaban uno por uno la firma de conveniencia para aportar al Fideicomiso de Jubilación. Para el Juez no contó la asamblea general en que el SUNTUAS, académico y administrativo tomó el acuerdo de alimentar el Fideicomiso con aportaciones individuales.

La UAS regresó el dinero aportado/descontado a los trabajadores en activo y jubilados. Medrano y sus despachos jurídicos se dieron vuelo arrebatando o cobrando “comisiones” por haber “ganado” el juicio.

La Universidad no ha regresado el dinero de sus aportaciones al Fideicomiso a un reducido segmento de jubilados porque empalmaron en su demanda contra los descuentos la exigencia de reducir a 20 o 25 años la edad laboral para la jubilación. El juez no ha fallado estos casos por ser “especiales”. La edad para alcanzar la Jubilación va in crescendo en las Universidades Públicas.

Desapareció entonces el Fideicomiso de la Jubilación Dinámica. Lo “esfumaron” los medranistas. La UAS gasta entre mil 500 y mil 750 millones anuales en el pago de esta prestación.

Lo del sindicato, sólo el pretexto

El proceso de selección de la nueva dirigencia del Sindicato de Trabajadores de la UAS, sección administrativos, es únicamente el pretexto para violentar la autonomía del alma mater.

En el Congreso del Estado obran iniciativas de reformas a la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Sinaloa, cuyo contenido es aberrante y atentatorio contra la autonomía.

Las iniciativas fueron confeccionadas desde afuera, por “agentes externos”, con la asesoría de un grupúsculo conocido como el “cártel de los jubilados” y actores políticos que sueñan con detentar el control de la Universidad.

El Consejo Universitario, máximo órgano deliberativo y de toma de decisiones de la UAS, en el marco de su autonomía y de sus atribuciones, de hecho y por derecho, dijo no a esas iniciativas porque de ser aprobadas generarían desestabilización y caos en la institución y un retroceso en su crecimiento académico.

Es Marco Antonio Medrano el “impulsor” de esas iniciativas. De afuera, le llegó ahora el apoyo de dos diputados de Morena. El pretexto para desencadenar el ataque y el linchamiento contra autoridades de la UAS es hoy en día la elección interna en el sindicato administrativo.

Ese es el argumento para provocar escándalo. Los legisladores Pedro Villegas Lobo y Beatriz Adriana Zarate, sin ninguna facultad y fuera de sus actividades sustantivas, irrumpieron en el proceso de “registro” de la planilla de Medrano en la oficina del Colegio Electoral del SUNTUAS. Posaron para la foto. Gritaron y ya tienen días atacando a la Universidad e insultando la inteligencia de los sinaloenses.

La dirigencia del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa reaccionó legalmente y presentó una denuncia de juicio político en contra de los dos diputados de Morena.

El Secretario General del Sindicato Único de Trabajadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa SUNTUAS sección Administrativos, José Carlos Aceves Tamayo acompañado por un grupo de universitarios presentó ante la Oficialía de Partes del Congreso un documento sustentando jurídicamente la exigencia de juicio político contra los dos legisladores.

Los diputados Pedro Alonso Villegas Lobo y Beatriz Adriana Zarate fueron acusados “de violentar la normatividad, la libertad sindical y la autonomía del sindicato.

En el clímax del atentado a la autonomía sindical, la diputada de Morena, Adriana Zarate, en su defensa expuso que participaron como observadores del proceso interno del Suntuas y comentó (sic portal electrónico de Noroeste) que su injerencia “da validez a la transparencia con la que debería erigirse la Universidad con orgullo, incluso, debería ser el mismo Rector el que abra este proceso derivado de la insatisfacción de sus agremiados”, manifestó.

Es saludable, abundó, “que sea el propio Rector Juan Eulogio Guerra Liera el que invite a más observadores, para darle certeza a estos procesos”.

O lo que es lo mismo, la legisladora convocó al rector de la UAS a que sea él, ¡el rector! el que violente la autonomía del sindicato y que se entrometa en el proceso de elección de la agrupación, la cual goza de plena autonomía sindical para celebrar la elección de sus dirigentes.

Pero nada es casual, nada…

Van contra la autonomía de la UAS

Van contra el pago de las jubilaciones

También te puede interesar