La mega marcha y el “miedo” a Cuén.

Campus

Jaziel Trasviña Osorio.

En el momento en que se supo de la convocatoria a la marcha por la paz y la concordia realizada el viernes pasado en la ciudad de Culiacán, el departamento de prensa del gobernador Rubén Rocha y sus corifeos de algunos medios de comunicación intentaron minimizar la misma y desacreditar la autenticidad de la manifestación.

La consigna era clara, dar la impresión a base de programas radiofónicos a modo y columnas políticas por encargo de que en Sinaloa todo está bien y que la concentración ciudadana a la que se convocaba no era una genuina inquietud social por los alarmantes índices de inseguridad y asesinatos en el estado, si no, por el contrario, solo era una demostración de poder del presidente del partido Sinaloense Héctor Melesio Cuén Ojeda.

Como dicen los abogados suponiendo sin conceder que así fuera, la campaña de desprestigio en contra de la  movilización en lugar de mermar los bonos políticos de Cuén Ojeda lo catapultó a un escenario en donde será él y su partido quienes marquen la pauta y sean el fiel de la balanza en las próximas elecciones.

Según el gobernador Rubén Rocha y sus adláteres, es falso que en la mega marcha participaron sectores productivos de la sociedad, asociaciones civiles, sectores campesinos, obreros, padres de familia, jóvenes, activistas sociales etc. Todo fue obra de Cuén.

 ¿Entonces los más de 24 mil ciudadanos que marcharon a su lado, son integrantes de su grupo y pueden ser movilizados a cualquier hora y para cualquier propósito?

Con estas aseveraciones del gobierno estatal, son ellos, no Cuén, quienes reafirman que el presidente del partido Sinaloense es la figura de más peso político en la entidad y que tiene una estructura y una capacidad de movilización que ningún otro partido posee.

Si la marcha fue en efecto una medición de fuerzas, imagínese usted de lo que es capaz Cuén Ojeda cuando se trate de movilizar a las masas para apoyar a un determinado proyecto político, o más aun, ese “ejército” de simpatizantes será determinante al momento de “operar” y resguardar una elección.

De ahí el miedo a Cuén Ojeda y el desquicio del gobernador Rubén Rocha, así las cosas.

También te puede interesar