Lopitos defiende a los narcos… ¡ante el mundo!
Lo que nos faltaba, Lopitos defiende a los narcos no solamente en México sino también… ¡ante el mundo!
Sobre el asesinato del candidato presidencial de Ecuador Fernando Villavicencio, el de los abrazos no balazos repudió que se culpe a los narcotraficantes.
Que no inventen, dijo en su mañanera de ayer.
Son puras “conjeturas”, según el payaso de palacio nacional, aunque exista una declaración del asesinado sobre amenazas de muerte por el cártel de Sinaloa.
A quién se le puede ocurrir semejante barbaridad de pensar que los criminales sean asesinos.
Tiene que probarse, por supuesto, pero descartarlo nomás por sus pistolas es exhibirse mundialmente.
Ese rufián que sin pruebas todos los días denuesta inocentes por el sólo hecho de pensar diferente, no permite que alguien pueda considerar asesinos a los narcos.
Un ridículo más, otra vez en el ámbito internacional, ahora ante un asesinato fuera del país.
Para lo que le importa al que presume ser el más amado, hasta el infinito y más allá.
OTRO MADRAZO DE LORET AL “HONESTO” LOPITOS
Otro madrazo en la nuca le acaba de pegar Carlos Loret al “honesto” Lopitos.
Contratos rateros por casi 500 millones de pesos en beneficio de una gran amiga del presidente.
Ni más ni menos que la hermana del draculín Adán Augusto López Hernández, quien por cierto reaccionó furibundo ante la noticia.
Otro robo documentado, con la misma reacción oficial de perseguir a quienes informan en lugar de castigar a los corruptos.
Y Lopitos el cínico seguirá sacando el pañuelito blanco.
Así de desvergonzados, ladrones sin llenadera que todos los días nos desgracian.
Lo bueno es que cada vez falta menos para que se vayan al rancho del peje.
SUSPENSIÓN DEFINITIVA CONTRA LIBROS DE TEXTO
La prohibición de distribuir los libros de texto gratuitos es obligación que resulta de una suspensión definitiva por la autoridad judicial.
Así procede, porque no se cumplieron los procedimientos establecidos en la ley de consultar a padres de familia y maestros.
Expediente 784/2023 ante el Juzgado Tercero de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México.
Queja presentada por la Unión Nacional de Padres de Familia, asociación civil.
En sus considerandos, el Juez refiere el artículo 113, fracción cuarta de la Ley General de Educación, sobre la elaboración, edición y actualización de los libros de texto gratuitos.
El detalle relevante, que todo mundo sabemos no se cumplió, es que lo anterior debe darse mediante procedimientos que permitan la participación de los diversos sectores sociales involucrados en la educación.
Se concedió entonces la suspensión definitiva.
La orden de que antes de continuar con la edición, impresión y entrega de los libros se verifique se hayan observado los procedimientos legales respectivos.
Y la sentencia puntual: “de no haberse observado las reglas en comento para la aprobación de unos (planes y programas) y otros (libros de texto), se suspenda la impresión y entrega de los libros de texto”.
El incumplimiento de las reglas es conocido por todos y hasta presumido por el gobierno con el alegato de que los libros fueron elaborados por puros “expertos” que trabajan en la Secretaría de Educación Pública.
Queda claro que el presidente de la república y gobernadores incurren otra vez en desacato.
Una nueva burla a la ley, y una violación increíble a los derechos de nuestros niños y los de sus familias.
Libros de texto con errores ortográficos, con datos falsos y con un muy vulgar adoctrinamiento político partidista a favor de Morena.
Absolutamente inadmisible.
Por eso esta nueva lucha contra quienes pretenden imponernos una falsa educación a nuestros niños y jóvenes.
Necesitamos hacerlo con fuerza, porque una vez más está demostrado que al gobierno no le importamos ni tantito.
Nuestros derechos tirados a la basura con ese clásico y trágico de “no me vengan con el cuento de que la ley es la ley”.
No es solamente distraernos frente a otros problemas graves como la violencia y el pisoteo de nuestra democracia.
Es seguir violentando y destruyendo nuestro futuro, como si no hubieran hecho ya más que suficiente.
