PRESUPUESTO ESTATAL PARA 2024. SIN SIMULACIONES
Alfonso Carlos Ontiveros Salas
Aparentar bondades por parte del Gobierno del Estado para la Universidad Autónoma de Sinaloa, en el presupuesto estatal para 2024, es una simulación que ofende a la comunidad universitaria y al pueblo de Sinaloa.
Incrementar el subsidio irreductible que recibe la Universidad Autónoma de Sinaloa en alrededor del cuatro por ciento es la consecuencia natural por el comportamiento inflacionario en la economía nacional.
El subsidio de la Universidad Autónoma de Sinaloa que recibe para cumplir con sus fines de educar tiene tres componentes y que son los siguientes: a) subsidio federal directo; subsidio federal que recibe el Gobierno del Estado por participaciones federales de los cuales el Gobierno del Estado le aporta a la Universidad el porcentaje convenido, y c) los recursos propios, que no son parte de la federación ni del Gobierno del Estado sino propiedad de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
El irreductible lo conforman las partes que proporcionan a la Universidad del subsidio federal directo y del recurso federalizado o sea el que recibe el Gobierno del Estado de las participaciones federales, mismo subsidio que es auditado por la Auditoría Superior de la Federación.
Es el sunsido del que se dispuso para las compras aprobadas por el Comité de Adquisiciones de la Universidad Autónoma de Sinaloa, que provocó primero la vinculación a proceso y posteriormente la separación del cargo del Rector Jesús Madueña Molina y de los miembros del referido Comité.
El recurso aplicado es eminentemente federal y auditado por la Auditoría Superior de la Federación, mismo que la Fiscalía estatal y el Juez de Control lo ignoraron por completo y dictaron esas medidas perversamente perjudiciales al régimen de autonomía y el autogobierno de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
El otro componente del subsidio o sea los recursos propios que son autogenerados por la propia Universidad Autónoma de Sinaloa, y que ha sido la diferencia legal que se ha sostenido contra la Auditoría Superior del Estado por carecer de competencia para auditarlos, un Tribunal Colegiado de Circuito ya resolvió desechando diversas quejas promovidas por la ASE contra suspensiones definitivas dictadas por jueces de distrito en favor del Rector y del Encargo del Despacho de la Rectoría Robespierre Lizárraga Otero, en las que se reitera el argumento de la defensa universitaria de que la ASE nada tiene que auditarle a la Universidad Autónoma de Sinaloa..
El anuncio de una aportación estatal extraordinaria de 1,300 millones de pesos no es una aportación que beneficie a la UAS porque es para pagar los adeudos al SAT ocasionados con motivo de no haberse retenido los impuestos de los salarios de los trabajadores administrativos de la UAS porque fue un acuerdo pactado por el Gobernador cuando fue Rector con el Sindicato de trabajadores de la UAS. Ese es el motivo de la aportación estatal que en nada beneficia a la UAS. Si se es honesto, no hay que presumir bondades donde no las hay.
Aun así, la persecución política sigue fastidiando la tranquilidad rosalina cuando el día de hoy se celebra una nueva audiencia inicial precisamente por la postura de la UAS de no reconocer, porque no la tiene, ninguna competencia de la Auditoría Superior del Estado para auditar los recursos propios de la UAS. El motivo de la audiencia es por el inexistente delito de abuso de autoridad. Que descaro.
En la carpeta procesal de donde emana la cita para la audiencia de hoy, no hay delito y tampoco los imputados tienen la calidad de servidores públicos por las razones que de sobra han quedado justificadas en otros expedientes procesales afines a este último, sin que las autoridades estatales tengan el menor respeto a la legalidad y a la presunción de inocencia de los involucrados en los mismos. No se preocupe Gobernador porque la genta vaya a apoyar al Rector Madueña Molina, lo hace de manera libre, preocúpese usted de que no lo sigan conduciendo en la ilegalidad.
La defensa sigue aportando resultados sin que el Juez de Control admita que no tiene la razón. Sigue dictando resoluciones arbitrarias ya que su postura, a la vista de todos, es la de cumplir a cabalidad las instrucciones que recibe desde el palacio de gobierno sin importar el respeto a la legalidad.
Las carpetas seguirán apareciendo toda vez que esa es la consigna que ha recibido la Fiscalía estatal, un instrumento de represión sin moral alguna, que seguirá empecinada en remover al Encargado de la Rectoría en la audiencia de revisión de medidas cautelares del próximo seis de diciembre. La comunidad universitaria no debe seguir esperando sin que se tomen medidas más radicales y obligar por la fuerza que cese toda persecución política contra la UAS y sus autoridades. No hay que omitir, que la legalidad es lo que menos ha importado al gobierno del estado y sus títeres. La defensa plena a la autonomía universitaria y a su régimen de autogobierno es un imperativo. Ya basta.
La UAS no se toca, la autonomía universitaria se respeta.
¿Usted qué opina?
