Rocha traiciona a Inzunza y lo tiene como distractor
Cosas veredes, Rubén Rocha traiciona a Enrique Inzunza Cázarez y lo tiene como burdo distractor.
De presunto alfil y casi seguro candidato por la gubernatura, el chaquetas se desinfló al evidenciarse públicamente como depravado sexual y violador.
Terminó siendo un lastre para la cuatroté.
Tuvieron que soportarlo, porque quitarle la candidatura afectaría al verdadero amor de Rocha Moya.
La sucesión morenista cambió, y el primero en la lista pasó al tercer lugar.
Con un gobernador tan necio y tan soberbio es imposible descartarlo, pero las cosas se le salieron de control.
Pero ni que fuera gripa, resulta que el principal heredero es Juan de Dios Gámez Mendívil.
Otro violín y depravado, también de costura y clavo según las lunas.
El plan B es con el Secretario de Administración y Finanzas estatal, Enrique Díaz Vega, señalado como contacto directo del gobierno sinaloense con los narcos.
Rubencito quisiera poner como su candidato a uno de los chapitos, pero resulta imposible por muchas ganas que tenga.
Regresemos al señalamiento de que el chaquetas Inzunza es puro distractor, para explicarlo.
No es casualidad la difusión sobre el citatorio judicial de un juzgado para que el candidato a senador comparezca por las denuncias de acoso y abuso sexual formuladas por la jueza Ana Karina Aragón.
Nada de que se les chispoteó, porque tienen absolutamente todos los controles.
El chaquetas tuvo que aguantar la exhibida, tan gritón que ha andado de que lo de la denuncia en su contra son puros inventos de los adversarios.
Terminará con la declaración de “inocente”, lograda la distracción de concentrar en un solo violador la polémica sobre los abusadores sexuales.
“Yo te voy a proteger” le dijo Rocha a su querido violín Juanito, candidato a la presidencia municipal de Culiacán.
Un intento de controlar los daños en beneficio de quien pasó a ser el “número uno” de la sucesión, porque las cuentas electorales se complicaron.
Ahí está Inzunza el “único” acusado de violador, es el grito dirigido desde el tercer piso, que ni los más tarados se lo creen.
ENCUESTADORES HIPÓCRITAS Y DESVERGONZADOS
Otros que no se engañan ni solos son los encuestadores.
Hay que ser muy desvergonzados para, después de muchos meses de mentir con enorme descaro, salir a explicar de última hora que sus encuestas que tanto nos presumieron están manipuladas.
Que los encuestados mienten a propósito, es el argumento para intentar lavarse las manos.
El cinismo está a la vista de todos, como si no fuera tan evidente que los cuchareos fueron con todo propósito porque se vendieron y así pactaron hacerlo.
Veremos la noche de este domingo el tamaño de sus mentiras que repetirán en las próximas elecciones, al cabo que no pasa nada.
