UNAM, IPN y UAEM retiran a residentes de hospital en Ecatepec tras muerte de estudiante por COVID
El alumno fue obligado a trabajar pese a que ya presentaba síntomas de COVID-19.
Después del fallecimiento a causa de COVID-19 de Jorge Alejandro López Rivas, alumno de la licenciatura de Médico Cirujano de la UNAM y médico interno del Hospital General de Ecatepec, la Facultad de Estudios Superiores Iztacala retiró a todos sus estudiantes residentes asignados a dicha dependencia.
Ante esto, la directora de la Facultad de la UNAM, María del Coro Arizmendi, aseguró que esta medida – de retirar a sus alumnos de hospitales que atienden a enfermos de coronavirus- estará vigente hasta que se mejoren las condiciones para que todos puedan realizar su trabajo con las medidas de seguridad.
Dicha decisión se da tras una reunión con personal de la Secretaría de Salud del Estado de México, del Hospital General de Ecatepec y con el grupo de médicos internos de pregrado de la Facultad, en la cual se acordó que se llevarán a cabo revisiones a las distintas sedes hospitalarias, para que, en las que no puedan proporcionar condiciones óptimas para el desarrollo de sus actividades se retiren de inmediato.
Debido a ello, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) también decidieron retirar a sus doctores residentes para evitar que se contagien de COVID-19.
Jorge continúo trabajando pese a contagio
Fueron los médicos internos del Hospital de Ecatepec quienes denunciaron que el pasado 4 de enero falleció Jorge Alejandro, de 23 años, por contagiarse del virus SARS-CoV-2 al estar como residente en el área de urgencias.
A través de una carta abierta a la población, los internos detallaron que el alumno de la UNAM inició con síntomas el pasado 12 de diciembre, después se reportó enfermo y acudió a valoración pero las autoridades del hospital lo obligaron a trabajar “porque no se veía tan mal”, tres días después le hicieron la prueba de diagnóstico de PCR para hacer efectiva su incapacidad.
Sin embargo, el 21 de diciembre acudió a un médico particular porque saturaba 79 por ciento de oxígeno pero sus jefes le pidieron que “buscara la manera de que fuera valorado en el Hospital de Ecatepec”.
Blanca Cortés Martínez
El Universal
